La Traviata, de Giuseppe Verdi con Dirección escénica: Ana D'Anna. Dirección musical: Antonio Maria Russo. Elenco: Carolina Gómez, Ivana Ledesma (Violetta Valéry), Sebastián Russo, Pablo Urban (Alfredo Germont), Ernesto Bauer, Juan Font (Giorgio Germont), Josué Miranda, Pablo Urban (Gastone), Rocío Arbizu (Flora Bervoix), María Almeida (Annina). Juventus Lyrica. En el Teatro Avenida de la última función: 1 de junio 2019.
La Traviata con música de Giuseppe Vedi, libreto de Francesco Maria Piave está inspirado en la Dama de las Camelias de Alexandre Dumas, estrenada en 1853 en el teatro La Fenice de Venecia.
En el siglo XIX se consagran las mujeres domésticas y las de vida fatal entre la diferencia de la sociedad burguesa y capitalista que determina el tránsito de un nueva sociedad.
Se imponían la inferioridad de condiciones en la mujer prohibiendo reuniones públicas, se abolió el divorcio y se buscó la pureza individual y perfección, existiendo el "angelismo" para los hombres como estado superior descarnado para jóvenes virtuosas, convertido en doctrina por la Iglesia en 1854.
La literatura contestó con la misoginia en historias femeninas contrarias a Diderot y Shopenhauer que formaron ése paradigma, pero hubo otros como Voltaire y Saint Simon que se opusieron y la creación literaria contestó a la misogenia con ideas renovadoras del feminismo en 1850 con Georg Sand.
En ése contexto Marie Duplessis con 13 años llega a París huyendo del maltrato familiar y diez años después muere de tuberculosis, entre tanto conoce a Alejandro Dumas (h) que fue su amante y la inmortaliza en "La dama de las Camelias" como Margarita Gautier.
La novela emocionó a Verdi que la renombró como Violeta Valery donde ofrecía fiestas suntuosas en su mansión Grand Palace y en la obra Violeta es aceptada como objeto de placer refinado para la sociedad burguesa.
Allí reside su tragedia con sus propios amantes de pseuda honradez que la condenan cuándo ella aspira a un amor verdadero que ésa sociedad venera, donde los prejuicios y apariencias la humillan y obliga a sacrificar su felicidad.
Se cuenta que Marie Duplessis fue amante de Franz Liszt que sentía atracción y sus personajes subyacen como fuerza antagónica, cuándo Violeta claudica ante su padre ante el amor por Alfredo, y no contara con la fuerza que mantiene la vida, en la vida.
A modo de preludio a telón abierto los que ingresan a la sala perciben el movimiento de personas paseando observando muebles, sillas, algún alhajero y un piano central con copas como presumiendo una subasta terminada, después de una exhibición el telón cierra y cuándo abre con los mismos elementos que tenía la subasta, está Violeta con la fiesta a pleno con una gran cúpula que supone el Grand Palace de gran sobriedad ante sus invitados. La puesta gira sobre el eje de Violeta, una mujer de endeble salud que brilla en la adversidad, y más aún en el centro de una fiesta hostentosa.
La soprano Carolina Gómez desempeña un rol sobrio y se sobrepone su actuación con su potente voz con excepcionales variaciones agudas, que va delineando su personaje con excelencia. Su amado Sebastián Russo, encarnó a un Alfredo con pulcritud vocal y con una actitud dramática apocada sin deslucir. Ernesto Bauer interpretó a un gran Giorgio Germont, y junto a Gómez lograron emotivos dúos muy atractivos.
El resto de los intérpretes cumplieron sus roles y su desempeño con suficiencia adecuada. De puesta muy escueta y simple con back proyecciones casi sin escenografía ampulosa, pero sobria. D'Anna logra montar distintos ambientes: al comienzo la bella cúpula para la fiesta, luego un bosque de árboles en otoño que nos indica el advenimiento de la tragedia, y al final una ventana con la tímida luz que se filtra, nos predispone a que Violeta está próxima a un triste final y que la poca luz hace sentir la intimidad de los solos y dúos, nos predisponen al desenlace trágico.
La orquesta ejecutó con corrección y brindó contrastes musicales de escuetos tempi, de los temas con lirismo y sofisticación bajo una correcta dirección.
Juventus Lyrica inicia la temporada con una obra clásica de buen nivel en conmemoración de su 20º aniversario, con una fiesta sobre el escenario para coronar una magnífica velada operística para recordar.